Crepe de durazno con crema

Las crepes son originarias de la región de Bretaña, al oeste de Francia, en donde se llaman krampouezh; actualmente es un plato consumido a diario en todo el país, especialmente en el Chandeleur 3​ o Fiesta de la Candelaria, como parte de la tradición local (habitualmente se sirven acompañados de sidra). En esta región francesa se distinguen dos platos parecidos: las crêpes elaboradas con trigo candeal y generalmente reservadas a los dulces y las galettes elaboradas con trigo sarraceno (o alforfón), en general reservadas a rellenos salados. Este tipo de trigo oscuro fue traído a Europa de China y a su paso por Europa Oriental dio origen a una comida similar, los blinis.

Ingredientes:

Masa:

1 taza de harina
1 pieza de huevo
2 cucharadas de mantequilla derretida
1 1/2 tazas de leche

Salsa: 

1 taza de crema
1 lata de leche condensada
1 lata de durazno en almíbar para rellenar
1/4 de taza de almendra fileteadas y tostadas, para decorar

Preparación:

1. Licuar el harina, huevo, la mantequilla y la mitad de la leche. Mezcla hasta incorporar bien todos los ingredientes, agrega la leche restante y vuelve a mezclar. Es importante que la masa te quede ligeramente espesa, si no te quedarán gruesas las crepas, puedes agregarle más leche si es necesario.
2. Calentar un sartén antiadherente a fuego medio y pon un poco de mantequilla. Agrega un poco de la masa y mueve el sartén para que cubra todo el fondo con una capa muy delgada. Cocina hasta que las orillas comiencen a despegarse y voltea la crepa para cocinar el otro lado.
3. Cocina 30 segundos más y retira del fuego, para conservar su temperatura guarda en una bolsa de plástico.
4. Para hacer la salsa: Licua la crema y la leche condensada.
5. Toma una crepa, rellena con dos rebanadas de durazno y cubre. Sirve la salsa sobre la crepa y espolvorea un poco de las almendras.